IGNACIO TOVAR
Crece el fuego con el viento
En la pintura de Ignacio Tovar, milimétrica y con mucho color, son características unas líneas perfectas que hace a mano y que recorren el espacio del cuadro cambiando constantemente de dirección, como un río que se mueve lentamente por la tierra o una corriente marina que se va adaptando a la forma de la costa. Son pinturas rigurosas, en silencio, que entran en el campo de la pura abstracción, con algunas ráfagas de luz que marcan los tiempos: tiempo de creación por parte del autor, y tiempo de reflexión y disfrute por parte del espectador.
Con los años, las pinturas de Tovar han ido evolucionando hacia una mayor sobriedad en el color, más empastado, con alteraciones más suaves y reduciendo a un solo color los puntos de tensión. Por otra parte, las líneas que forman los canales cada vez están más próximas entre sí y el arco que forman es más abierto. La idea del agua, de la que parte su obra, se va diluyendo a fuerza de tenerla asumida, pero en la amplitud del arco puede permanecer la referencia a las olas del mar.
Los títulos de sus obras –siempre realizadas con pigmento y látex vinílico sobre tela– poseen claras referencias al flamenco, del que el autor es un gran aficionado. Tovar, mientras escucha música, va anotando en una lista los versos, principalmente de soleares, que le parecen más sugerentes como títulos de cuadros, para, posteriormente, irlos asignando a sus piezas.
En “Crece el fuego con el viento”, su octava exposición individual en la Galería Rafael Ortiz de Sevilla, Tovar nos invita a deambular sin prisas a lo largo de su producción más reciente, dejándonos sorprender por la forma, la textura, la luz y el color.
Ignacio Tovar (Castilleja de la Cuesta, Sevilla. 1947)
En su dilatada trayectoria artística, este veterano artista andaluz ha disfrutado de becas como las de la Casa de Velázquez, el Centro de Promoción de Artes Plásticas e Investigación de Nuevas Formas Expresivas del Ministerio de Cultura, la Fundación March o la United Status Information Agency (Chicago, USA).
Su obra, que ha podido verse en múltiples exposiciones en galerías e instituciones, forma parte de importantes colecciones públicas como el Museo de Arte Abstracto Español (Cuenca), el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (Sevilla), el Museo Patio Herreriano (Valladolid) o la Biblioteca Nacional (Madrid), entre otras.