Como un jardinero de fina mirada, Guillermo Pérez Villalta va desbrozando la Historia del Arte y siempre haciendo de la misma una lectura personal e incluso marginal, en su sentido más comprometido. Con estas reflexiones sobre el Rococó, Guillermo Pérez Villalta lo reivindica como un auténtico movimiento artístico en sí y no como lo que siempre se consideró: un subestilo del Barroco, evidenciando con el más puro sentido del humor, que este movimiento no solo pertenece a un tiempo en la Historia sino que es una constante en todas las épocas.